Nuestra Señora de Coromoto, también conocida como la Virgen de Coromoto, es una de las figuras religiosas más queridas y veneradas de Venezuela, celebrada con profunda devoción cada septiembre. Declarada Patrona de Venezuela en 1942, Virgen de Coromoto: La Patrona Milagrosa y Protectora de Venezuela, se erige como un faro de fe y esperanza para millones de venezolanos y católicos en todo el mundo
Su historia se remonta al siglo XVII, cuando se dice que la Virgen María se apareció al jefe de la tribu Coromoto, instándolo a él y a su pueblo a abrazar el cristianismo. Cuando la ciudad de Guanare fue fundada en 1591, la tribu local Cospes huyó a la selva para escapar de los esfuerzos de la Iglesia Católica por evangelizarlos. Según la leyenda, la Virgen María se apareció dos veces al jefe de la tribu: primero en 1651, diciéndole que se bautizara, y nuevamente el 8 de septiembre de 1652, cuando se apareció en su choza. Cuando el jefe resistió una vez más e intentó atraparla, ella desapareció, dejando atrás una pequeña pintura de sí misma. Esta imagen milagrosa llevó al jefe a finalmente convertirse.
Hoy, esa sagrada reliquia está consagrada en el Santuario Nacional de Nuestra Señora de Coromoto en Guanare, donde los peregrinos se reúnen para buscar su intercesión por la paz, la salud y la guía. Los creyentes ven a La Virgen de la Coromoto como una fuente de protección espiritual, especialmente en tiempos de dificultad. Muchos recurren a ella en momentos de lucha personal, buscando fuerza y consuelo en asuntos de familia, salud y fe.
Su imagen, a menudo representada con una corona y el niño Jesús en sus brazos, sirve como un poderoso símbolo de amor maternal y cuidado para todos los que buscan su ayuda. Al acercarnos a su día de fiesta en septiembre, es un momento para la reflexión y la oración.
Virgen de Coromoto: La milagrosa patrona y protectora de Venezuela
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